El Castillo de Báguena, de origen musulmán se alza sobre la localidad del mismo nombre, en la parte superior del cerro derecho y proporciona una visión privilegiada de sus alrededores. La edificación fue construida sobre los restos de un asentamiento íbero. Tras la reconquista, el castillo pasó a manos de la Orden del Temple. En esta época se constituyó alrededor del enclave la localidad de Báguena.
Durante el siglo XIV sufrió numerosas modificaciones, los restos que se pueden visitar actualmente datan de dicho siglo. Por su proximidad con la frontera castellana el castillo fue objeto de una multitud de ataques.
La popularidad del castillo aumentó tras el asedio del rey Pedro I de castilla y la resistencia por parte del alcaide Miguel de Bernabé bajo el poder de la Corona de Aragón en 1363.
Se conservan únicamente 2 de los torreones del recinto y algunos restos de la muralla. En los alrededores se han localizado fragmentos de cerámica tanto ibérica como musulmana.
La restauración la realizamos sobre el torreón principal del castillo. De planta cuadrada, de unos 8 m. de lado, fue restaurado conservando la construcción de mampostería y de sillería en las esquinas. Se advierten también los arranques de parte del recinto amurallado y la puerta de entrada es de arco apuntado.
El segundo torreón se sitúa a unos 20m. del principal, hecho de tapial y piedra, también de planta rectangular, pero de menor tamaño y altura.